Este sábado, la ciudad que vio nacer a Whitney Houston acogerá sus restos mortales para dispensarle su último adiós, y el lugar elegido para celebrar el funeral no podría ser más apropiado: será en la Iglesia Baptista de la Nueva Esperanza, de cuyo coro formó parte la artista cuando aún era niña, hace más de treinta años.
La familia ha declinado la posibilidad de ofrecer una celebración masiva, por lo que el evento será exclusivamente para familiares, amigos y demás invitados. Así lo explicaba encargada del servicio funerario, Carolyn Whigham: "Su familia la ha compartido con el resto del mundo durante los últimos treinta años. Ahora es su momento para despedirse, en privado."
fuente: www.los40.com
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